La alimentación en el embarazo es un tema sobre el que la mujer que inicia su gestación debe indagar. Aunque actualmente el control sanitario de los alimentos es excelente, no se puede comer de todo.
Hoy vamos a hablar de dos enfermedades muy comunes y para las que la embarazada es población de riesgo.
Toxoplasmosis
Se trata de una enfermedad infecciosa, originada por un parásito llamado toxoplasma gondii que se encuentra en la carne de muchos animales, entre ellos el cerdo. También se encuentra en la tierra, en vegetales u otros productos contaminados por sus huevos.
No es una enfermedad grave de por sí, incluso muchas veces es asintomática o bien da sintomatología leve, similar a una gripe. Pero si se contrae durante el embarazo puede afectar de manera grave al feto, dependiendo del trimestre de gestación.
Las consecuencias que pueden sufrir las mujeres que contraen toxoplasmosis durante el embarazo pueden ser: abortos, problemas neurológicos graves del bebé, ceguera en el feto,….
Por eso durante el embarazo, tu matrona o tocóloga te van a pedir, en todos los trimestres, anticuerpos frente al toxoplasma en el caso de que hayas dado negativo. Si diste positivo en el primer trimestre, se considera que ya estás inmunizada. No habrá nada de qué preocuparse entonces.
Precauciones a tener en cuenta si has dado negativo en toxoplasmosis
- Lavar bien frutas y verduras, comerlas sin piel.
- No consumir embutidos no pasteurizados.
- Cocinar bien la carne, no tomarla poco hecha.
- Si tienes gato, ¡tranquila! Sólo deberás tomar algunas precauciones siempre y cuando salga a la calle o al campo. Y tener cuidado a la hora de limpiar su caja de deposiciones, utiliza guantes, lávate bien las manos o bien delega su higiene en otra persona. Con estas sencillas medidas no correrás ningún peligro y podrás seguir disfrutando de tu mascota.
- El toxoplasma se encuentra sobre todo en la tierra, con lo que si vas a manipularla (por ejemplo con labores de jardinería), debes utilizar guantes y después lavarte bien las manos.
Listeriosis
Es una infección causada por la bacteria listeria monocitogenes. Se trata de una infección alimentaria. Esta bacteria se encuentra habitualmente en el agua, el polvo, y puede infectar a múltiples especies tanto vegetales como animales.
En el periodo neonatal la transmisión madre-hijo es por vía transplacentaria.
Para la mayoría de infectados, la enfermedad es leve. Pero las embarazadas son grupo de riesgo, ya que son 20 veces más propensas a sufrir esta enfermedad y la infección puede suponer graves secuelas para el bebé.
La bacteria se ha conseguido aislar en alimentos como algunos quesos, embutidos, salchichas, ahumados,…
La bacteria se transmite al feto incluso antes de que la mujer pueda presentar síntomas. Las consecuencias pueden ser: parto pre término, aborto, muerte fetal, afectación neurológica.
Los síntomas para la madre son bastante inespecíficos, desde no presentarlos a tener sintomatología compatible con una gripe. Pueden éstos aparecer días después de haber tomado el alimento contaminado.
Si se logra diagnosticar durante el embarazo el tratamiento para prevenir la infección fetal será de antibióticos a altas dosis y durante periodos prolongados. El médico se encargará de la prescripción adecuada.
Medidas de precaución
- Limpiar con frecuencia el frigorífico
- Controlar que la temperatura del frigorífico sea igual o menor a 5ºC.
- Lavar las manos con agua y jabón después de manipular cualquier alimento fresco.
- Lavar meticulosamente las tablas de cortar, vaijlla, utensilios
- Evitar manipular a la vez alimentos cocinados y crudos.
- Lavar muy bien frutas y verduras crudas antes de su consumo
- Cocinar muy bien carnes, pescados.
- Evitar ahumados
- Evitar derivados cárnicos tipo salchichas, patés, fiambres, embutidos.
- Recalentar las sobras de comida hasta que se observe vapor.
- No comer quesos blandos tipo feta, brie, camembert, ni quesos tipo roquefort o cabrales.
- No tomar leche cruda
Cuidar la alimentación a partir de este momento es de suma importancia para garantizar tanto tu salud como la de tu bebé. Si deseas aprender más, te recomendamos el curso Embarazo Sano disponible en nuestra plataforma online MaterNatal Academy.
